EL DIA 4 DE AGOSTO DE 2020
Se declaró oficialmente que las realas son interés cultural, las protectoras lo vemos como el día mundial del maltrato animal.
Os quiero explicar que es una rehala y documentar con imágenes ese submundo.
EL MALTRATO CONTINUO.
Esas, las fotos, son de varias rehalas. Así tienen los cazadores a sus "amados" perros, mientras no les sacan a cazar.
Ahí, en la rehala, los cazadores y sus empleados, desechan parto tras parto a los cachorros que a su vista (son muy entendidos en esas lides) no van a servir para cazar o parir, les parten el cuello al nacer y a otra cosa.
Ahí, en la rehala, mantienen a sus perros sin ningún tipo de higiene y alimentándoles como mucho con chuscos de pan duro y agua.
Ahí, en la rehala, los perros adquieren Leishmaniosis, parvovirus, moquillo, sarna, erlíquia, parásitos internos, etc, etc, etc, a sus dueños les da lo mismo.
Ahí, en la rehala, aunque los perros estén enfermos, no pone un pie un veterinario, para los cazadores, eso, sería un gasto inútil.
Ahí, en la rehala, cuando los cazadores deciden que uno de sus perros no sirve ya para la caza o la procreación, les rajan el cuello y les extraen el micro chip, ya que el destino de esos que ya les sobran es el abandono, o la muerte y de esa forma no les pueden identificar como dueños.
Es de ahí, de la rehala, de donde salen los perros desechados, después de haber servido a sus dueños, para encontrar la muerte siendo abandonados con las patas partidas para que no puedan volver, o colgados, o ahogados. En ésto los cazadores son muy imaginativos, cualquier forma de morir dolorosa, que puedan dar a sus perros, la ponen en práctica sin ningún tipo de remordimiento.
Que no os engañen, ni la caza, ni la montería, ni nada relacionado con ello es un arte noble, como ellos nos quieren hacer ver.
Son lo que son.
Formas de divertirse de los que se aburren, infligiendo muerte a su alrededor y utilizando a sus perros como si fueran cosas, de ahí que no les importe si mueren, o si sufren.
Para ellos los perros son como las escopetas o los rifles. Si se vuelven viejos se tiran y adquieren otro.
Sin duda
Lo peor del género humano.
Autor: Juan Ramón Ortiz de la Torre